El tío Zacarías!

  Así fue como se le bautizo a mi carro, sus placas eran “ZCR”…  el Zaca nos llevo a distintos lugares a buena velocidad y volumen en las rolas del estéreo y sobre todo, nos transporto con seguridad. El clan Arroyo y los GiiLianos recibimos esta energía en forma de automóvil con aprecio y gusto; fue mi compañero por 10 meses.

  El pasado martes 12 de Agosto, un auto a exceso de velocidad me impacto directamente en mi puerta proyectándome en dirección a otro carro que se encontraba estacionado y un árbol, ocasionando una segunda colisión. Un choque de alto impacto.

  Las bolsas de aire estallaron, cristales también y quedé por segundos en shock; poco a poco recupere la conciencia mientras escuchaba a la gente que me hablaba preguntándome si estaba bien y trataban de abrir las puertas… estaba en camino a la oficina, de hecho a 4 cuadras de llegar; llegaron corriendo todos los gerentes y mi hermana. Entre llantos, molestias y caras de sorpresa por la imagen del carro el tiempo transcurría… yo camine los primeros momentos por la adrenalina en mi cuerpo pero después no pude mas y me senté, la ambulancia me traslado al hospital con un esguince cervical.

  El diagnostico fue benigno, salí caminando...  llevo tres días de reposo e inmovilizado por un collarín y chochos. Tengo las imágenes de las personas en mi mente, de mi madre en la ambulancia, mi hermana corriendo y en todo momento conmigo, el buen amigo y hermano Mike apoyando a la novia en el hospital abrazándome, mi papa revisándome como medico y conteniendo el llanto previo a que llegara la ambulancia y mis compañeros de trabajo haciendo llamadas y atentos…  todos preocupados.

  No he dejado de recibir amor de mi familia y llego el momento de compartir todo el caso con ustedes y hacerlo publico en términos generales, como prevención;  al Zaca, esa entidad energética, le debemos mucho. Es un héroe y ya esta en el cielo de los carritos, jejeje.

  Los accidentes existen y no tengo rencor para la persona que me choco, se veía bastante avergonzado y mal, quizá aún se juzga pero eso es su tema. Yo recibo el mensaje de desacelerar un poco mi vida y reposar, debo rediseñar y tomarme este tiempo para meditar. 

  Regresaré pronto con mi equipo de Giilianos, regresare pronto a correr y nadar, regresare pronto a mi vida cotidiana… mientras regreso, seguiré recuperándome con mi familia y conmigo;  recobrando fuerza.

Cuídense y sonrían, la vida sigue… J

Fernando Arroyo.