Noche atemporal…

Ok, un poco de inspiración en una noche calurosa… en este instante Merlín, mi padre… abrió una botella de tinto y celebra el cierre de un ciclo. Mientras platicamos y pensamos en que cenar, la música se escucha de fondo y nos reímos sobre historias de la experiencia vivida en 35 años.

Pensé en la famosa frase que para mí es débil, sin energía ni visión: “recordar es vivir”. Naaaa… creo que recordar muy de vez en cuando es bueno; rendirle un honor y un respeto a la experiencia vivida, pero solo de vez en cuando, como “conmemorar el pasado”; pero desde mi muy particular punto de vista; recordar siempre es vivir en el pasado.

Hoy honramos la experiencia pero nos enfocamos en el futuro, hoy nos implementamos con magia y determinación un nuevo recuerdo del futuro. Hoy, en esta noche honramos y respetamos esas imágenes y recapitulamos información para proyectarla hacia el futuro, a un destino… un nuevo viaje.

Cuando te das la oportunidad de mirar por un segundo atrás y descubrir hoy en lo que te has convertido, es digno de honrarse.

En esta noche calurosa no hay lugar para el tiempo, cansancio o para el movimiento de los astros, el sol, día o la noche, en este instante se honra y respeta la experiencia… lo mejor es que solo es el comienzo, otro viaje comenzó ya…

Esta noche honramos la experiencia adquirida por Merlín.

Te amo y te admiro, papá.

Fernando Arroyo.